jueves, 20 de enero de 2011

el silencio que no grita vs el silencio que grita...


NO TE SALVES



No te quedes inmóvil

al borde del camino

no congeles el júbilo

no quieras con desgana

no te salves ahora ni nunca

no te salves

no te llenes de calma

no reserves del mundo

sólo un rincón tranquilo

no dejes caer los párpados

pesados como juicios

no te quedes sin labios

no te duermas sin sueño

no te pienses sin sangre

no te juzgues sin tiempo
pero si

pese a todo no puedes evitarlo

y congelas el júbilo

y quieres con desgana

y te salvas ahora

y te llenas de calma

y reservas del mundo

sólo un rincón tranquilo

y dejas caer los párpados

pesados como juicios

y te secas sin labios

y te duermes sin sueño

y te piensas sin sangre

y te juzgas sin tiempo

y te quedas inmóvil

al borde del camino

y te salvas

entonces no te quedes conmigo.

Mario Benedetti

viernes, 7 de enero de 2011

Triste desesperanza...


la vida no me alimenta, cada vez estoy más vacía, este muro me para, me obliga a sentarme, esperar y pensar...



Cierro los ojos y quiero romperlo,

pero no se rompe con los puños,

sino con recuerdos,

volveré a incorporarme, y alzando mi cuerpo

gritaré tu nombre al miedo,

a mi gran enemigo, a mi gran impedimento,

ni vergüenza, ni trapos viejos.

Destrozaré este bloque de cemento,

¡ahora!,¡ya!...¡no!, aguarda,espera, ¿qué es ese silencio?

la voz de aquel que antaño fue mi compañero,

no lo entiendo...

se suponía que rompería con todo

y caminaría de nuevo,

pero...¡qué ilusa!

caeré en este último intento,

la quietud me invade,

vuelta otra vez a la ausencia de movimiento,

si pudiese eliminarlo...

si se cumpliese ese deseo.

Esta vez me tumbo,

y tomando aire,

expiraré cuando llegue el momento,

le atraparé y se llevará

hasta el último de mis atrofiados huesos.



Cuando te vea otra vez, volveré a sufrir esto,

hasta entonces, me quedaré en el suelo,

luchando con mis versos.