De nuevo, las cartas con las que jugaba, me han vuelto a traicionar...
Es un extraño sentimiento bastante común, no puedo hablar con nadie.
y me priva la razón de una libertad ficticia donde respiras el aire que nadie contamina, donde alegre te diriges hacia una florecilla y oliendola comentas cuan real parece tu vida, pero sabiendo que lo que ves es mentira, nadie te ofrece sus rodillas si las tuyas están dolidas de tanto caer, y todo el mundo te ve retroceder impávidos, sin ningún atisbo de humildad, palbras y palabras que sabes que son compromiso, que están más alejadas de ti de lo que la vista mirando el cielo puede diferenciar...
Todo y nada...Nada y todo... ahi me encuentro pisando lo que antes habían pisado los cerdos, este barro que se adhiere a lo que considero como mio, que me arrebata la vida con un gesto tan cruel... tan frío...
Intentaré permanecer en tus recuerdos mientras me dejen... mientras me dejes... como quien soy, no como quien puedas creer... sino como Diana, la que mueve las manos y hace cosas raras...
PD: no hay nadie más...puede que por eso...el silencio grita fuerte.
Noirelarme
